La aerotécnico que se maneja entre metales y engranajes
La Fuerza Aérea Ecuatoriana cuenta con equipos de vuelo que se encargan de la vigilancia, transporte y control aéreo nacional que le permite garantizar la soberanía e integridad territorial. Estos equipos de vuelo se encuentran distribuidos entre las distintas alas operativas en donde el personal militar trabaja de manera profesional para el cumplimiento de su misión.
El recurso humano es lo más importante para que las misiones de vuelo se desarrollen, entre ellos, se encuentra el personal de mantenimiento de aeronaves, quienes son los protagonistas anónimos que juegan un papel fundamental para el éxito de las operaciones aéreas.
Este trabajo en su generalidad ha sido realizado por hombres durante la mayor parte de la historia de la institución, sin embargo, en la observación de los múltiples talentos del personal femenino, la FAE ha visto que se encuentran gratamente motivadas por esta labor y que lo hacen con total profesionalismo, una de ellas es de la cabo segundo Johanna Chamorro, quien se encuentra en el Ala de Combate Nro. 21; ella forma parte de las misiones de vuelo al realizar el mantenimiento de los helicópteros AIRBUS H145, que es la última adquisición por parte de la Fuerza Aérea Ecuatoriana y que han realizado desde su llegada un sinnúmero de misiones de traslado de personal, transporte sanitario, transporte de ayuda humanitaria y de rescate de personas ante situaciones de riesgo como consecuencia de las inclemencias climáticas.
Para que toda esta ayuda haya llegado a quienes lo han necesitado, Johanna trabaja arduamente y al ser de las pocas mujeres pertenecientes a esta especialidad, aprende de los retos que se le presentan con optimismo, al punto de que actualmente forma parte de la tripulación menor, lo que le ha permitido realizar trabajos en apoyo a la comunidad de forma personal y directamente. Ella comenta que se siente muy orgullosa de quien es y de lo que su esfuerzo le ha permitido lograr en beneficio de las personas.
“Todos tenemos algo que nos hace únicos, nuestra seña de identidad y cada talento tiene su lugar esperándolo”, así comienza su relato al contar cómo ingresó a la Escuela Técnica de la Fuerza Aérea (ETFA), en donde consideró la especialidad de Mantenimiento Aeronáutico, a lo cual, para su sorpresa fue seleccionada y, a partir de ese momento aprendió acerca de las partes de las aeronaves, sus sistemas de funcionamiento, reparación, entre otras competencias que completaron sus conocimientos.
Posteriormente, trabajó en el Escuadrón de Mantenimiento de Aeronaves Supersónicas, específicamente, del avión Cheetah, en donde adquirió experiencia y desarrolló más la confianza, concluye diciendo “he vivido muchas experiencias buenas y malas, pero he aprendido mucho, todos los días me levanto con el fiel compromiso de aprender y mejorar, demostrar que aunque parezca difícil el camino, nada en la vida es imposible.” En la actualidad, ella labora en el Escuadrón de Mantenimiento de Sistemas Aeronáuticos Nro. 2123 ARPÍA, que le ha brindado la oportunidad de especializarse en otro equipo de vuelo y ampliar sus conocimientos, a trabajar en equipo y esforzarse para conseguir un fin común, para cumplir con el objetivo que tienen como escuadrón: mantener el mayor número de aeronaves disponibles, considerando la seguridad y la responsabilidad para que un equipo de vuelo sea aeronavegable.