Desde tiempos remotos, el hombre utilizó la palabra dirigiéndola hacia la psiquis del ser humano, como un arma y un medio poderoso de la humanidad para usarse de forma persuasiva. La comunicación ha servido como una herramienta capaz de generar opiniones, generar cambios sociales e influir en el pensamiento individual y colectivo.

La institución, como un ente estratégico, cuenta con un grupo de profesionales enfocados a la comunicación social, así como también al desarrollo de competencias enfocadas en operaciones psicológicas militares. Un ejemplo claro de eso es el papel de las operaciones psicológicas desempeñado en 1995, cuando en el alto Cenepa, el Ecuador utilizó más de dos millones de ejemplares entre cartillas, hojas volantes, afiches, stickers y otros impresos que fueron diseminados por los miembros de fuerzas armadas, las fuerzas de resistencia y la población civil, en las calles y ciudades del país. En las emisoras ecuatorianas se compatieron cientos de mensajes del frente militar que exhortaban a la unión nacional y a la colaboración ante la emergencia, con fondos musicales de marchas marciales y canciones militares. De igual forma, a través de la televisión se transmitieron spots motivando la confianza en el estado de preparación de las fuerzas ecuatorianas y generando la seguridad en la ciudadanía.

En los murales aparecieron slogans y consignas que llamaban a la integración y al patriotismoy pedían el apoyo de la población. Casos como este denotaron la importancia de la comunicación social y de las operaciones psicológicas militares, estableciendo la apertura de departamentos de comunicación social en cada uno de los repartos de la Fuerza Aérea Ecuatoriana.

Gracias a ello, hoy contamos con un sistema de comunicación social consolidado y con convicción, que ha sabido enfrentar con honor las peores crisis, entre desastres naturales, crisis políticas y crisis sanitarias brindando asesoría para la toma de decisiones de los altos mandos en pro de un accionar conjunto, mismo que nos ha permitido mantenernos fortalecidos.