DURÁN, GUAYAS – En un despliegue sin precedentes que combinó la capacidad operativa con el espíritu solidario de la institución, la Fuerza Aérea Ecuatoriana (FAE), a través del Comando de Operaciones Aéreas y Defensa (COAE), transformó la jornada de 1.500 niños y niñas del cantón Durán en una experiencia inolvidable cargada de sonrisas y esperanza.
Una llegada desde los cielos: El helicóptero H145 “Arpía”
La expectativa de los asistentes se elevó al máximo cuando el sonido de las turbinas anunció el momento cumbre del evento. En una maniobra de precisión y seguridad, el helicóptero H145 “Arpía” hizo su aparición para facilitar el descenso de Papá Noel. Esta experiencia única permitió que los menores no solo disfrutaran del personaje navideño, sino que conocieran de cerca una de las aeronaves más modernas de la flota nacional, utilizada habitualmente en misiones de búsqueda, rescate y vigilancia.
Mensaje de mando y compromiso social
El Brigadier General Mauro Bedoya Avilés, comandante del COAE, enfatizó el propósito de la institución en este evento:
“Nuestra misión trasciende las fronteras del aire. Hoy no solo volamos aeronaves, hoy volamos esperanza. Estar aquí en Durán es reafirmar que la Fuerza Aérea es un aliado estratégico de la comunidad y que nuestro mayor recurso es la confianza de los ecuatorianos”, señaló el General Bedoya.
Cultura, valores y presencia institucional
El agasajo navideño fue una vitrina de los talentos y capacidades de la FAE. El programa incluyó la participación de:
Coro Aviadores Militares: Quienes, junto a coros infantiles invitados, interpretaron un repertorio que resaltó los valores de paz y unión.
Escuadrilla Canina FAE: Que realizó demostraciones de agilidad, fortaleciendo el vínculo de confianza con los más pequeños.
Actividades Lúdicas: Estaciones recreativas enfocadas en promover la amistad y los valores ciudadanos.
Alianzas por el bienestar
El evento culminó con la entrega masiva de obsequios, fruto de una gestión coordinada entre la Fuerza Aérea e instituciones de los sectores público y privado. Esta sinergia demuestra que el trabajo conjunto es el motor para alcanzar impactos sociales significativos en zonas de atención prioritaria.
Con esta gran jornada, el COAE cierra su ciclo de vinculación social del año, ratificando que servir al país también significa estar presente, proteger y compartir con su gente en territorio.