En una operación sin precedentes, el avión C130, se ha convertido en el símbolo de la lucha incansable contra el narcotráfico y el terrorismo en Ecuador. Con Galápagos como escenario, la Fuerza Aérea Ecuatoriana (FAE) colaboró para dar un golpe contundente a las redes del crimen.
Once toneladas y media de sustancias ilícitas sujetas a fiscalización, fueron interceptadas en operaciones militares coordinadas en alta mar, dentro del territorio nacional en la región Insular o Galápagos. Este paraíso natural, reconocido mundialmente por su biodiversidad única, se convirtió temporalmente en el escenario de una desafortunada problemática que acongoja al país.
El avión C130, una imponente aeronave al servicio de la Patria, fue símbolo de la determinación y la capacidad operativa de la FAE. Con su capacidad de carga y su alcance estratégico, transportó el botín decomisado en la lucha contra el narcotráfico hasta la seguridad de tierra firme. La ciudad de Quito, capital ecuatoriana y epicentro de la acción estatal, fue el destino final de esta carga. Y mientras tanto, en tierra firme, las autoridades competentes darán inicio al proceso judicial correspondiente.
Pero más allá del aspecto logístico, este episodio representa un golpe significativo a las finanzas y operaciones de los carteles de la droga que amenazan la estabilidad del país y de la región. La FAE, en su papel de guardián de la soberanía aérea nacional, ha demostrado una vez más su capacidad para enfrentar los desafíos más difíciles con éxito, incluso en los rincones más alejados del territorio nacional.
Esta representa un acto de compromiso con la seguridad nacional. En un mundo donde las amenazas se multiplican y evolucionan, la Fuerza Aérea Ecuatoriana se mantiene firme en su misión de proteger a la población y defender el territorio nacional y al Estado. Además de que mantiene sus equipos de vuelo y personal altamente capacitado para el cumplimiento de estas misiones y reafirma su compromiso inquebrantable con la seguridad del país y su determinación para construir un futuro de justicia y paz.
